lunes, 6 de julio de 2009

Poema de la Dignidad

Tu nombre
Es un rincón
De mi cuerpo.
Tu voz
Descansa
En el mar
De mis recuerdos.
Fluyes
En el día
Pero hace tiempo
Que la hierba
Húmeda
Se olvidó de ti.
Quisiste ser
Un sueño
Que yo repitiera
Una y otra vez
Entre los árboles.
Pero si renunciaste
A quererme
Mucho más
Renuncio yo
A amarte.
No juegues,
Princesa sin corona.
Te digo adiós,
Con tu olor
Todavía
Entre mis labios.


Eduardo Martínez-Rico

No hay comentarios:

Publicar un comentario